Y, ¿tú quién eres?
No nos han presentado, no te conozco.
Desde que oí tu nombre, empecé a tener cuidado.
Me contaron que traías malas intenciones
y el recelo se instaló en mi casa.
Conseguiste perturbar a los míos.
Ahora me abruman las dudas.
La turbación me está ganando la partida
y tú, te ríes en la sombra, a mis espaldas.
Desconfío. Sospecho que amenazas con quedarte.
Sabemos de tu familia, de tus vecinos
a quienes ya les vencimos.
Recién nacido infundes pavor y pánico.
Ansiedad, angustia, preocupación.
Comienzas a ser verdadera pesadilla.
Te crees rey por tu corona.
Estremece no saber dónde estás escondido.
Cobarde coronavirus.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión me interesa mucho.